Hay una sola verdad védica, una verdad eterna. Si uno acepta o no acepta, si Dios existe o no existe, eso está ya más allá del punto. Sin embargo, hay una verdad que todos aceptan, ya sean religiosos o no religiosos: "la muerte es certera en este mundo". Nadie puede negar esto. Por lo tanto, en este mundo, la muerte es ciertamente una realidad; y otro punto es que en este mundo es también una realidad que alguien que nace debe morir irremediablemente. Y esa persona envejecerá, si es que dura. En este mundo, pueden tocar el harmonio pero tienen que aprenderlo de alguien. Yo les pregunté a los hermanos Punja: "Dónde aprendieron este asunto? De quién lo aprendieron?" Ellos dijeron: "Lo hemos aprendido de nuestro padre". "Ustedes se lo deben a él, ¿no es cierto? ¿Y dónde aprendió él? Y la persona que le enseñó,¿ dónde aprendió?" El conocimiento relativo a este mundo que será destruído y dará resultados ilusorios de felicidad mundana, puede encontrarse allí también. Entonces, una persona inteligente aunque esté ocupada en estas cosas, entiende que yo soy una entidad eterna, que yo soy el alma que es parte de Dios. Es Dios quien mantiene este mundo, el manejo de todo está en sus manos. Estés donde estés, yo iré allí y te haré recordar. Tomar el nombre del Señor no gasta ninguna energía ni tiene costo, tampoco requiere de nada. Yo no he venido para tomar su dinero. Entiendan esto. Yo he venido para darles mi fortuna, que es este conocimiento. Esto es lo que yo digo en todos los lados a donde voy. No estoy aquí por dinero. Estoy aquí para dar una fortuna. Si ustedes reciben tan sólo una fracción de esta fortuna, entonces sus vidas serán completamente auspiciosas. Ésta es la razón por la que vine. Así que, por favor, tengan fe en mí, en que yo no he venido a tomar nada. Yo solamente vine para hacer sus vidas felices y para darles este mensaje de la India, por esa razón he venido. "Tamasa ma jyotir gamaya": no vayan hacia la oscuridad, eso es ignorancia; es todo una ilusión. Hoy en día todas estas instrucciones se llevan a cabo para rechazarlas. Vemos que ahora nuestros directores, profesores y estudiantes fuman cigarrillos y tantas otras cosas más. ¿Qué pueden enseñar? Sus personalidades no son buenas. ¿Qué pueden dar? Nuestra sucesión discipular se basa en verdaderos santos que han realizado bhajan: deberíamos aceptar sus enseñanzas. A menos que esta diplomacia sea controlada por el poder de dharma, el mundo estará arruinado.
Srila Gurudeva, 11 de marzo de 1999, Fiji.
Fuente: www.bhaktabandhav.com
Traducción al español: Damodar-priya dasi
Edición: Hari-rasa das
